El potencial de las tecnologías digitales abre nuevas oportunidades para optimizar procesos en los ámbitos de políticas públicas y privados pero a la vez también puede suponer la creación de nuevas amenazas a los derechos fundamentales en forma de vigilancia masiva, manipulación de información y nuevas formas de discriminación.

Este primer ciclo ofreció ampliar la mirada y profundizar en los conocimientos sobre cómo hacer de la tecnología digital una aliada integrando los derechos humanos y las libertades.

La inteligencia artificial está siendo empleada en múltiples ámbitos de nuestra vida con consecuencias aún impredecibles. Hoy día, existen algoritmos alimentados por grandes bases de datos que toman decisiones autónomamente. Esta automatización de decisiones puede ser una gran aliada en tanto que permite delegar ciertas decisiones, pero ¿qué pasa si se equivocan? ¿Qué pasa cuando un algoritmo es racista o machista? ¿Cómo y quien asegura que estos sistemas matemáticos no están discriminando colectivos? El segundo ciclo, Inteligencia Artificial y derechos humanos: utopía o realidad?, tuvo como objetivo reflexionar, debatir y conversar al respecto.

Cabe destacar que la referencia más importante para la conceptualización gráfica general fue el proyecto Input = Output de Isabel Mager.

Durante el 2019 y 2020 se llevaron a cabo encuentros que abordaron cuestiones relacionadas con tecnología, ética, derechos humanos y justicia social.  Para el tercer ciclo se buscó compartir conocimiento sobre el impacto de la IA en el sector de la justicia social enfocadado a que las organizaciones sociales incorporen la perspectiva digital a su trabajo de defensa de derechos, además de conocer ejemplos de legislación de la IA y medidas adoptadas por diversas administraciones.